ENTRADA CURSO CREACION DE
EMPRESA
Nos encontramos ante un curso de creación de empresas,
dirigido a empresarios o empleados de las pymes afiliadas a la cámara de
comercio Granada, que deseen crear una empresa y/o a empresas establecidas que deseen
mejorar sus procesos productivos. El curso se distribuye exclusivamente en
soporte digital, desde un aula situada en un entorno virtual de aprendizaje,
compuesto por 6 módulos y 4 espacios de comunicación tablón del profesor, debate, foro y chat por skipe. Y espacios
para novedades, biblioteca virtual del curso y recursos adicionales y un
SYLLABUS. Para Cada modulo se formularon objetivos, actividades, se pusieron a
disposición recursos.
MODULO I - INTRODUCCION COMPETENCIAS TIC
MODULO II - LA EMPRESA Y SU CONTEXTO
MODULO III - DINAMICA EMPRESARIAL
MODULO MODULO IV - MERCADEO Y VENTAS
MODULO V - PRESUPUESTO Y FINANZAS
MODULO VI - PROYECTO FINAL
VALOR AGREGADO DEL CURSO CREACIÓN DE EMPRESA
En este curso tuvimos en cuenta la
comunicación sincrónica a través del Chat y Skipe, que cubre por lo menos dos
horas diarias. Esto ayuda a mejorar la comunicación No solo con el docente sino
también con sus compañeros, Factor importante en el desarrollo de competencias emocionales.
Muchas Veces los estudiantes al realizar
sus actividades se les presentan dificultades, a las que no reciben respuestas
en la comunicación asincrónica, generando incertidumbre, malestar, que influyen
en su motivación y algunos terminan abandonando el proceso de aprendizaje; esto
lo confirman algunas investigaciones realizadas en la línea de la educación e
inteligencia emocional
La competencia de la comunicación
Las personas dotadas con esta
competencia:
-Captan las señales emocionales
-Escuchan bien, buscan la
comprensión mutua y no tienen problemas
con compartir la información
-Alientan la comunicación sincera
-Saben escuchar las buenas y las malas
noticias.
Algunas Investigación Educativa Sobre las Emociones En E-learning
En la actualidad la relación Educación y
Emociones, ha ido ganado espacio y despertando un gran interés en la comunidad
científico y educativa, desarrollándose así cada vez con más frecuencia
investigaciones enfocadas en el diseño y experimentación de entornos de
aprendizaje online que incorpora recursos, estrategias y actividades
relacionadas con los temas, inteligencia y educación emocional; estas
aportaciones de estudios científicos exploran la relación emocional, con las
tics, analizando el andamiaje emocional en situaciones educativas mediadas por
la tecnología, por otro lado algunas estudian las causas del índice de abandono
y fracaso que presentan el modelo e-learning, fenómeno en que parece tener gran
relevancia la desmotivación y la frustración.
Respecto a la frustración del estudiante
en línea, Borges
(2007) afirma
que esta representa una de las dificultades que el tutor encuentra en sus
alumnos dentro de la experiencia formativa; y según él las causas pueden ser
las siguientes:
El alumno al desconocer las tácticas,
habilidades y competencias esenciales para convertirse en un adecuado
estudiante en la formación virtual, lo vuelve apático y termina con su proceso
educativo.
La poca interacción entre los actores
del programa, a pesar que es un ambiente virtual, se requiere destrezas de comunicación
interpersonal, ya que se aprende socialmente.
La poca utilización, por parte de los
alumnos, de los espacios de comunicación que genera el ambiente virtual, como
son los foros, ensayos, conferencias, etc; la falta de disciplina y
administración del propio tiempo, ya que tratándose de un espacio virtual donde
no hay que cumplir horarios, ni acceder físicamente a espacios, el alumno debe
proyectar un cronograma de actividades, dentro de la cuales se cuente sus
deberes académicos.
Rebollo
(2010), en un
estudio sobre las emociones como prácticas ideológicas que sirven a propósitos
específicos en el proceso de creación y negociación de significados; muestra en
sus resultados, que existen una serie de conflictos emocionales vinculados con
expectativas sociales y roles de género que están directamente asociados al
abandono escolar.
Viadero
(2007), afirma
que después de un análisis de doscientos siete estudios basados en el fomento y
manejo de las emociones en estudiantes norteamericanos, se puso en evidencia
que existe una correlación, entre la enseñanza de destrezas sociales y el
mejoramiento del desempeño escolar.
Efklides
(2011), estudio
las interacciones entre la metacognición, la motivación y el afecto,
encontrando que son componentes del aprendizaje autorregulado, para él hay que
darle relevancia a estos aspectos en el diseño de los entornos de aprendizaje
en el nivel universitario, puesto que a un nivel macro representan de alguna
manera características de la persona, que le ayudan al logro de metas,
creencias de autoeficacia, en el desarrollo de tareas Online.
Maquilón
Sánchez, J. Hernández Pina. (2011).
Analizan las motivaciones que guían a los estudiantes hacia el aprendizaje y
afirman que es de gran utilidad para el diseño y la implementación de
propuestas de intervención que mejoren la calidad del aprendizaje. E igualmente
afirman que es necesario profundizar en las estrategias de estudio, aprendizaje
y enseñanza, así como en las motivaciones de los estudiantes, ya que puede
llegar a ser determinante en el mejoramiento de la calidad de la educación, y
además servir como una herramienta válida y fiable para reducir el fracaso
escolar.
Por su parte, Rebollo
Catalan, M. Garcia Perez R (2008).
Estudian, las emociones implicadas en el aprendizaje online, reconociéndolas y
valorándolas, con el propósito de elaborar y experimentar un modelo pedagógico
para el aprendizaje, b-learning que incluyen estrategias de regulación
emocional en su desarrollo; puesto que consideran que al relacionar el ámbito
emocional con nuevas herramientas y contenidos de aprendizaje en línea, supone
una interesante línea de investigación.
Vallejos
(2012).
Considera, que La motivación en el ámbito académico es relevante, dado que
determina el aprendizaje significativo, logrando incrementar el rendimiento
académico, consecuentemente es necesario conocer que las emociones tales como
el logro del aprendizaje, el disfrute del aprendizaje, el orgullo, la ira, la
ansiedad, la vergüenza, la desesperanza o el aburrimiento son muy importantes
para la motivación de los estudiantes, el aprendizaje, el rendimiento,
desarrollo de la identidad.
La motivación
Es un estado intrínseco, el cual regula las
respuestas emocionales y las de comportamiento, es además, un factor primordial
para lograr el éxito en cualquier actividad.
Pekrun
(2006), afirma
que es necesario avanzar en metodologías mixta en donde se integren conceptualmente la emoción, la motivación y
la cognición, de tal manera que en la educación se le dé valor a las emociones
y sus implicaciones en la práctica educativa y en la investigación. De igual manera se debe tener
en cuenta los efectos de las emociones experimentadas, en el aprendizaje y aquellas que estén
relacionadas con la actividad, como el disfrute, la frustración, el
aburrimiento, la alegría, la esperanza, el orgullo, la ansiedad, la
desesperación, la vergüenza y la ira, relacionadas con el rendimiento y el
ámbito académico así como las emociones de resultado en relación con el éxito o
el fracaso.
Aires,
Teixeira, Azevedo, Gaspar, y Silva. (2006),
estudian los elementos integrados en el proceso de aprendizaje de las
relaciones interpersonales en las comunidades virtuales, mostrando que estas
relaciones son reguladas por valores compartidos por las emociones y los
conflictos vivenciales, lo anterior puede derivar en sugerencias y
recomendaciones valiosas en el diseño e implementación de actividades en este
modelo educativo.
Otro aspecto que está siendo estudiada
por los investigadores, es el alto índice de deserción en los campus
universitarios online, factor determinante para medir el éxito o el fracaso de
los programas ofertados por las universidades. A este respecto, Ibrahim
(2007) estudia
las tasas de deserción en el Medio Oriente del modelo online, considera que “la
retención de los estudiantes y las altas tasas de deserción, han sido un
preocupación constante de los administradores de instituciones educativas en
Asia, América Latina y áfrica”. Por otro lado, afirma que en cuanto al contexto
de aprendizaje en línea, algunos investigadores encontraron que la tasa de
deserción de los estudiantes de educación superior a distancia es
significativamente más alta que en las clases tradicionales la cual se mantiene
más o menos constante entre el 40% y el
45%, Por su Parte, Giorgis
de Orozco (2010),
presenta un informe, en el cual plantea algunas alternativas que se podrían
tener en cuenta para bajar el índice de deserción en un ambiente de aprendizaje
online. Lo primero es Considerar al alumno integralmente, sin descuidar sus
aspectos emocionales, culturales, e interdisciplinarios, creando un ambiente
motivador que privilegie las relaciones interpersonales.
LA EDUCACIÓN EMOCIONAL
La educación
emocional, factor determinante en la motivación y el éxito en el
aprendizaje E-learning
Poseer un coeficiente intelectual elevado no es garantía suficiente
para tener una vida exitosa, tanto a nivel profesional como en las relaciones
interpersonales; pero si éste va acompañado de un coeficiente emocional elevado,
el éxito se hace natural y permanente. Por esta razón, cada vez se hace más
evidente la necesidad de que en la educación presencial, b-learning y
e-learning, se implementen programas tendientes a desarrollar competencias
emocionales. Así mismo, la finalidad de la educación es la formación integral
del estudiante, de tal manera que se formen hombres y mujeres que estén al
servicio de la sociedad, no sólo como profesionales exitosos, sino también como
personas comprometidas con el cambio, a la reconciliación, con unos principios
de tolerancia, solidaridad y respeto a la dignidad humana.
Por lo anterior, la educación emocional, se puede desarrollar teniendo en cuenta el grado de compromiso del colectivo educativo y requiere de una propuesta que incluya a toda la comunidad educativa centrada en la formación humana. En este sentido, es necesario crear una nueva forma de comunicación, en donde se promueva un clima especial y se pueda expresar libremente lo que se siente, sin coacciones, de tal manera que los estudiantes y los profesores se hagan más conscientes de sus emociones, de sus fortalezas y potenciales internos, donde los profesores puedan guiar a los estudiantes en una continúa ampliación de los conocimientos, potenciando sus capacidades, habilidades, destrezas y competencias.
La educación emocional parte de la convicción de que las instituciones educativas deberían promover situaciones que posibiliten el desarrollo de la sensibilidad y el carácter de los estudiantes, sobre la base de que en el quehacer educativo se involucra, tanto el ser físico como el mental, el afectivo y el social.
Igualmente,
la educación emocional está estrechamente relacionada con la motivación, ya que
una persona es inteligente
emocionalmente en la medida que puede mejorar su motivación y por ende, mejorar
en todos los aspectos de la vida, en su aprendizaje, sus relaciones, su vida
laboral y económica. Una definición, según Bisquerra
(2000) “la motivación es
un constructo teórico hipotético que designa un proceso complejo que causa la
conducta. En la motivación intervienen múltiples variables (biológicas y
adquiridas) que influyen en la motivación, direccionalidad, intensidad y
coordinación del comportamiento encaminado a lograr determinadas tareas o
actividades”.
En
el aprendizaje se puede utilizar la motivación como motor para desarrollar y
potenciar las emociones que favorecen el aprendizaje y manejar aquellas
emociones que los obstaculizan. Generalmente los estudiantes motivados aprenden
mucho más que aquellos que no tienen motivación. Pero a la vez la motivación es
trascendental en la labor docente y es importante no olvidar la reciprocidad de
esta relación. Por tanto la educación emocional es una herramienta que puede
conllevar a la motivación, a desarrollar y potencializar competencias
emocionales, puesto que a diferencia de lo que sucede con el coeficiente
intelectual, el coeficiente emocional puede mejorarse con relativa facilidad,
como lo han demostrado diferentes investigaciones, en particular de los
doctores Simmons
y Simmons, (2001), cuyos resultados obtenidos en
diversos estudios, demuestran que, con perseverancia se puede mejorar y lograr
significativos avances en el coeficiente emocional con cambios positivos y
permanentes. Mientras que para Maturana
(2002), “Las distintas emociones tienen distintos efectos sobre
la inteligencia; así, la envidia, la competencia, la ambición….. Reduce la
inteligencia”. Por esta razón los ambientes de aprendizaje deben contribuir a
dar relevancia al desarrollo de las competencias emocionales, promoviendo un
cambio de actitud frente a la vida y sus acontecimientos.
Por
lo anterior podemos afirmar que todas las actividades de la vida están regidas
por lo que sentimos y pensamos. En particular, en la educación, las emociones
pueden facilitar el aprendizaje o en algunos casos entorpecerlos, porque no
solo afecta la motivación, sino también la memoria; al respecto Goleman
(1996), afirma: “Cuando las emociones entorpecen la
concentración, lo que ocurre es que queda paralizada la capacidad mental
cognitiva que los científicos denominan “memoria activa”, la capacidad de
retener en la mente toda la información que atañe a la tarea que estamos
realizando. La memoria activa es una función ejecutiva por excelencia de la
vida mental que hace posible todos los esfuerzos intelectuales, desde
pronunciar una frase hasta desentrañar una compleja proposición.
De
acuerdo con lo anterior, en la educación es importante tener en cuenta la parte
emocional de los educandos, dado que es éstos se sienten ansiosos, enfurecidos
o deprimidos, no sólo dejan de asimilar de deforma eficaz la información, sino
que estas emociones negativas impiden la concentración, desviando su atención
hacia sus propias preocupaciones; es imposible tener un sistema de razonamiento
que funcione bien, sin tener un sistema de emociones que funcione bien; por
consiguiente, existe una relación armónica entre las áreas del pensamiento y
las emociones.